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TETSUO'S CORNER

Música

V DE VITALIC

V DE VITALIC

Si hay algo por lo que destaca el productor francés Pascal Arbez, más conocido como Vitalic, es por sus impresionantes directos, esto se puede comprobar con solo ver la legión de fans que siguen con enorme fervor sus adrenaliticos lives.

Pues bien, todos esos seguidores del sonido del ex integrante de la plantilla de Gigolo Records, están de enhorabuena ya que se ha cumplido uno de los deseos más esperados de los vitalicmaniacos: por fin uno de sus lives ha sido grabado y registrado de manera oficial, y puesto a la venta desde el pasado 24 de Septiembre, algo que muchos techno heads venían demandando desde el comienzo de las andanzas de este artista.

El disco, publicado en Different Records y bautizado con el no muy original nombre de V Live, no sorprenderá demasiado a los que estén acostumbrados a seguir sus directos, pero no se puede negar que desprende la misma energía que estos y eso hace que merezca la pena su escucha (y su baile).

En este trabajo se incluyen algunas de las mejores piezas de su aclamado OK Cowboy, incluyendo, por supuesto su megahit La Rock, tema que ya ha pasado a la historia del techno, situándose al mismo nivel que otras joyas como el The Bells de Jeff Mills o el Born Slippy de Underworld.

De su primer, y único, LP, hasta la fecha, también incluye temas como el No Fun, el My Friend Dario  o el Polkamatic, además de una versión especial del Valetta Fanfares, aunque se echa de menos el Newman, que, en mi humilde opinión, es el mejor tema de ese disco.

Por otro lado también se incluye el tema Bells, que sacó junto a Linda Lamb, en su proyecto paralelo, The Silurees y ocho temas inéditos especialmente confeccionados para este live, que siguen, en su mayor parte, la estela del sonido Vitalic, aunque encontramos alguna sorpresa, como Disco Noveau,  de descarados tintes Daftpunknianos, o el Filth And Dirt Go Ahead, donde el artista decide sacar su vena mas rockera.

También sorprende, aunque menos, con Rythm In A Box Part 1 And 2, que empieza con un toque de electro experimental, al estilo Warp, para acabar derivando en un bestial homenaje a otra de las joyas del techno, concretamente al Spastik de Richie Plastikman Hawtin.

El resto de los temas llevan el sello de identidad del artista, con esa mezcla gamberra entre el techno y el electro que tanto le caracteriza, añadiendo toques tribales, como es el caso de Bambalec o imprimiendo toques melódicos, como en el caso de Anatoles, posible futuro single de estudio.

En definitiva, un disco que dejará más que contento a los fans de este productor francés y que hará bailar al resto del personal al frenético y vital ritmo que imprime su música. Que se prepare el mundo, que la fiesta no ha hecho más que comenzar.

 

EL DEBUT EN LARGO DE PIG & DAN

EL DEBUT EN LARGO DE PIG & DAN

Tras triunfar con una enorme cantidad de maxis rompedores, como On To The Beat, 88 o ese bombazo llamado After Ibiza, el dúo Pig & Dan, una de las mayores apuestas del prestigioso sello, Cocoon, propiedad del kaiser Sven Vath, han debutado en largo, facturando una obra llamada Imagine, publicada, por supuesto, en el sello aleman, y en la que se han decidido por seguir una línea continuista respecto a lo que venían haciendo en sus anteriores trabajos.

El disco se compone de siete tracks, todos entonados hacia el techno house, moviéndose entre corrientes electrónicas y más o menos minimaleras, pero sin abandonar el trance progresivo, estilo con el que se iniciaron en el mundo de la música.

En esa onda se mueven todos los temas que componen el disco, desde Imagine, tema que da título al trabajo, hasta el ácido Globetrotter, pasando por Sly Detector, Moths o el electroso K-Os.

También se tornan, muy sutilmente, hacia la cyberdelia en Sweet September y hacia el trance progresivo en Sympathy For The Devil.

Nos encontramos ante un buen álbum que hará temblar las pistas de baile más selectas.

SAMIM Y LOS NUEVOS CAUDALES DEL HOUSE

SAMIM Y LOS NUEVOS CAUDALES DEL HOUSE

Hace poco comentaba que este estaba siendo un gran año para el berlinés Samim, pues bien, para rematarlo, este joven dj, productor y remezclador ha decidido sacar un largo, en el que, como no podía ser de otro modo, no falta su mega hit Heater (sobran las palabras), y lo ha hecho bajo el prestigioso sello, Get Physical.

El álbum se llama Flow, y es una gran muestra de los nuevos sonidos que azotan las pistas de baile y de los nuevos caminos por los que se mueven el house y el techno actualmente.

El disco empieza de manera sorprendente con Intro, un tema que se, mueve por los terrenos del deep house, con toques dub, para seguir por una onda que nos recuerda a los buenos tiempos del house iniciático de Chicago, con Springbreak.

Es ya a partir del tercer tema, llamado Blackdeath, donde se empieza a percibir la seña de identidad Samim, con ese tech house de tintes étnicos y bajos poderosos, algo que se repite en Ukaka y en Setupone, donde los elementos latinos alcanzan su máxima expresión.

El disco continua con el pistero Zleep, un track de techno house poderoso, y, para rematar se introduce en terrenos más pantanosos con el house electrónico de Forcefeedback o, incluso, en el R&B, con el torrido The Lick, autentico homenaje a la música de Prince.

Si eres de los que odia a muerte el Heater, no te dejes llevar por tus sentimientos y escucha este disco. Estoy seguro de que sorprenderá a más de uno.

LA DOBLE CELEBRACIÓN DE MODESELEKTOR

LA DOBLE CELEBRACIÓN DE MODESELEKTOR

Un enorme acontecimiento les aguarda a los dos integrantes del proyecto Modeselektor: ambos van a ser padres, y qué mejor manera de celebrarlo que con un nuevo largo, y, todavía mejor, llamar a este nuevo trabajo Happy Birthday .

Pues dicho y hecho, este dúo ha decidido sacar un disco con ese título, bajo supervisión del sello B Pitch Control, como no podía ser de otro modo y han facturado una obra llena de electrónica gamberra con constantes bajadas y subidas, como si de una montaña rusa sónica se tratase.

Así vemos que se deciden por traspasar las barreras del hip hop de vieja escuela con temas como 2000007 o The Dark Side Of The Sun, en la que los sintetizadores se mezclan con las voces de raperos como TTC o Puppemastaz, respectivamente.

Su faceta más gamberra y pistera se puede comprobar en tracks como Sucker Pin, tech house con tintes de EBM, Deboutonne, psicodélico tema que bebe de las mieles del minimalismo bordercommuniano y, sobre todo, el techno hit Black Block, autentica delicia para las pistas de baile. Pero llevan el gamberrismo mas alla, homenajeando a temas de la época dorada de la tralla como The First Rebirth de Jones & Stephenson o el Hyper Hyper de Scooter.

También se deciden a introducirse por los mundos del dub, con temas como Godspeed, el divertido y folklórico Happy Birthday o con el raggamuffin de Let You Love Grow, en el que colabora la voz de Paul St. Hillarie. Otra ilustre colaboración es la de Thom Radiohead Yorke, en esa muestra de pop electrónico llamada The White Flash.

Les da por la vena introspectiva con el ambient de Edgar y por la experimentación en temas como BMI, en el lado más electrónico, o en el bizarro The Wedding Tocatta Theme, con orquesta de cámara incluida.

Desde aquí nuestra más sincera enhorabuena por la futura paternidad de estos artistas y por su nuevo y flamante trabajo.

 

 

 

SWAYZAK TIENEN NUEVO DISCO

SWAYZAK TIENEN NUEVO DISCO

El dúo Swayzak, vuelve a la carga con un nuevo largo titulado Some Another Country, publicado en el prestigioso sello K7, algo que viene siendo habitual en los últimos trabajos de este proyecto, y la verdad es que hay que admitir que nos encontramos ante una obra exquisita y llena de matices, llena de sentimiento y de atmosferas electrizantes, acercándose a la perfección que ya consiguieron hace unos años con aquella maravilla llamada Dirty Dancing.

Este nuevo trabajo del tándem formado por James Taylor y David Brown, está compuesto por diez temas, que abarcan multitud de estilos, aunque hay un predominio del house con tintes poperos.

De esta forma ya se marca el inicio con esa maravilla techno housera, con tintes de electro pop ochentera, llamada Quiet Life, en la que unos maravillosos vocales redondean una pieza magnifica. Esos mismos vocales otorgan personalidad al delicado Smile & Receive, un fantástico track de cálido deep house.

Los sentimientos llegan a su máximo esplendor, en No Sad Goodbyes, donde la voz de Richard Davis toma el protagonismo en una amalgama de tech house atmosférico.

También hay reminiscencias detroitnianas, como se puede apreciar en temas como en el pistero So Cheap, en el galáctico y popero Silent Luv o en el electroso Distress & Calling, donde incluyen un toque acido, e incluso homenajean a los viejos Orbital, en el bestial They Return, que recuerda enormemente a los mejores tiempos de los hermanos Hartnoll.

Se deciden por los breaks furiosos en By The Rub Of Love y se introducen en el techno introspectivo con Pukka Bumbles.

Pero también se deciden por la experimentación en el extraño Clacktronic, un curioso tema de techno dub adornado con sonidos étnicos y con potentes efectos atmosféricos.

En definitiva, nos encontramos ante un gran trabajo que hará las delicias de los amantes de la música electrónica de calidad.

 

LA RADIOLINA DE MANU CHAO

LA RADIOLINA DE MANU CHAO

Y a es de dominio público el hecho de que Manu Chao ha vuelto a sacar disco al mercado, tras el parón de 2001, con Próxima Estación Esperanza, parón solo interrumpido por la publicación de su directo con la Radio Bemba Soundsystem y el disco libro Sibérie M'etait Contée.

Pues bien, su nuevo disco, bautizado como La Radiolina, sigue la estela que dejó en Próxima Estación..., es decir una amalgama de sonidos multiculturales y de estilos urbanos, yendo desde el reggae hasta la rumba, pasando por el punk, el ska, la música tradicional africana, etc, y, de nuevo, vuelve a conformar una torre de Babel, al emplear cuantos más idiomas mejor, encontrándonos con temas cantados en inglés, francés, español, portugués, ruso, etc.

Precisamente el problema de este disco radica en eso, en la falta de novedad y de sorpresa. Manu vuelve a emplear la misma factura, las mismas fusiones, los mismos clichés, que en toda su discografía, el que esperaba un evolución del artista quedará francamente desilusionado, quizá si se note un mayor empleo de la guitarra eléctrica, sobre todo en temas como Rainin' In Paradize o The Bleedin Clown, pero allí se acaba la novedad.

El resto del disco es más de lo mismo, un trabajo lleno de cortos temas que siguen una sucesión lógica, incluso muchos están enlazados entre sí conformando un todo indisoluble, aunque eso es algo que ya habíamos visto a lo largo de toda la discografía del artista mas poliglota del mundo, tanto solo como en compañía del resto de Mano Negra.

De nuevo vuelve a soltar sus soflamas anti políticas, especialmente contra el imperialismo yanqui, reclamando los derechos de los desfavorecidos y poniendo de manifiesto la enormes injusticias que asolan esta sociedad, tan solo hay que ver el titulo de algunos de los temas como  Politik Kills o Mundorevès, para darse cuenta de por dónde van los tiros.

Además, se permite homenajes a Marisol (si, habéis leído bien) y a Joseito Fernandez, autor de la famosa Guajira, en los temas La Vida Tómbola y Mala Fama, respectivamente.

En definitiva, nada nuevo en el horizonte. Muy lejos quedan los tiempos de aquel Clandestino.

 

 

¿ES UN PAJARO? ¿ES UN AVION? NO, ES SUPERMAYER

¿ES UN PAJARO? ¿ES UN  AVION? NO, ES SUPERMAYER

Por fin hemos podido escuchar el que es uno de los discos más esperados del año, se trata del primer LP del proyecto conocido como Supermayer, proyecto formado por Michael Mayer y Superpitcher, los dos grandes pesos pesados de ese gran sello que es Kompakt, bajo el cual, como no podía ser de otro modo, ha visto la luz este trabajo, bautizado como Save The World.

La verdad es que nos encontramos ante un trabajo sobresaliente, en el cada tema es diferente al anterior y en el que los dos productores van mas allá de la electrónica, para introducirse en todo tipo de terrenos sonoros.

Así nos encontramos ante doce pistas, entre temas completos e interludios, que deben ser escuchados de principio a fin, para poder saborear lo que nos ofrece esta gran obra.

Lo primero que se puede destacar de este disco es su eclecticismo, moviéndose entre la electrónica más pistera y el ambient más atmosférico. Del primer caso encontramos claros ejemplos como el trancero Saturndays, el techno funk de Planet Of The Sick o ,sobre todo, el primer single extraído del álbum , el rompepistas Two Of Us, y del segundo caso encontramos temas como el corte de ambient futurista con toques jazzísticos, llamado Superbrain Transmission, la cortísima y delicada pieza For Luzie, y que, en menos de un minuto, que es lo que dura el tema, nos transporta a través de paisajes sintéticos, o ese elegante track, que es Cocktail For Two, autentica delicia lounge.

También el pop, con toques funkoides y electrónicos, hace acto de presencia en este trabajo, a través de temas como Us And Them o The Art Of Letting Go, que nos recuerdan enormemente al sonido de gente como Pulp, The Stone Roses o Belle & Sebastian. Incluso se acercan al folk en esa épica joya que es The Lonesome King y al techno pop petardo de tintes ochentosos, en el pegadizo Please Sunrise, que parece beber, por momentos, del sonido de los Pet Shop Boys o del antiguo Jimmy Somerville.

No sé si este disco salvará el mundo, como propaga desde su titulo, pero lo que sí es seguro es que proporcionará muy buenos momentos a los amantes de la buena música. Ha merecido la pena la espera.

 

 

 

 

TROY PIERCE: PERDIDO EN LOS TERRENOS DEL MINIMAL

TROY PIERCE: PERDIDO EN LOS TERRENOS DEL MINIMAL

Por fin tenemos el placer de escuchar lo nuevo de Troy Pierce, el alumno más aventajado de la tropa M_nus, que acaba de publicar un nuevo, y gran EP en el sello del señor Hawtin.

Este nuevo trabajo de Pierce se titula Gone Astray, y está compuesto por diez tracks, lo que hace que se pueda hablar de un pseudo LP, en el que todos los temas están íntimamente relacionados con el título de la obra, haciendo referencia al sentimiento de sentirse perdido y solo en el mundo, poniendo de manifiesto un autentico alegato existencialista en cada uno de los tramos del disco.

Como no podía ser de otro modo, el disco se mueve en los terrenos del mínimal tech de trazo grueso, como se puede comprobar en el tema Even It's Alone, subtitulado como Black Acid, aunque el acid brille por su ausencia, y que también aparece remezclado por Louderbach, que le da un toque más hipnótico.

También se mete en terrenos más cercanos al house en Lost On The Way To DC10, cuyo título no da lugar a más explicaciones. Este tema también tiene su correspondiente remezcla, que en este caso corre a cargo de Konrad Black.

Lleva el mínimal a cotas extremas en temas como Go Without Me (Come Back), y en su continuación, llamada Klitkut, e introduce elementos ácidos, ahora sí, en los temas Golden y en Fiinnished.

No abandona el mínimal en lo que parece ser la contrapartida del Go Without Me, de igual título, pero subtitulada como Stay Away, y toca, de refilón, el electro, en Word.

En definitiva, un trabajo, en la línea del Menos Es Mas, y digno del sucesor del trono Hawtiano

 

2007: EL AÑO SAMIM

2007: EL AÑO SAMIM

No cabe duda de que este está siendo el año del dj y productor berlinés, Samim.

Ya lo comenzó con buen pie, cuando vio como su, ya relativamente vieja, remezcla del Hay Consuelo, tema del chileno Pier Bucci, se convirtió en la canción mas oída en las mejores pistas de baile, e incluso fue radiada en las emisoras más comerciales. Pero esto no se quedo aquí ya que se convirtió en un autentico superventas, llegando al puesto 17 en las listas de ventas de singles de nuestro país.

Pero la cosa avanzaba, y este joven y prometedor productor, vio la gallina de los huevos de oro, por lo que decidió facturar, en el prestigioso sello Get Physical (el de MANDY, Booka Shade , DJ T y cia), un tema siguiendo las directrices del de Bucci, y el resultado fue el Heater que, con su fusión entre el house y la música andina, se ha convertido en el indiscutible hit del verano, creando, por igual, amantes y detractores del temita en cuestión, pero lo que nadie niega es que está siendo todo un éxito.

Y la estela sigue, ya que otro de los grandes hits de esta temporada, la electro-opera de los Italoboyz, bautizada con el rimbombante titulo de Viktor Casanova, tiene su máxima garantía en una remezcla concreta y, ¿de quién es esa remezcla?...pues nada más y nada menos que del señor Samim, por supuesto.

A esto hay que ir sumando la serie de remezclas que esta facturando para grandes de la electrónica como los Tiefschwarz, o el remix de otro de los posibles éxitos de este año, el Shirnkage de Craig Torrance & Philip Hochstrate.

En definitiva, que habrá que seguir la pista de este productor muy de cerca, porque va a dar mucho que hablar.

Y para el despistado que aun no conozca ese megahit que es Heater, en este enlace podrá disfrutar del mismo: http://www.youtube.com/watch?v=le860Jd-FqI.

 

SABOR A M.I.A.

SABOR A M.I.A.

Ya he escuchado el nuevo disco de la artista angloindú más famosa de los últimos años, la simpar Maya Arulpagrasam, más conocida como M.I.A (acrónimo inglés de Missing In Action, que se podría traducir como Desaparecido En Combate), y ahora toca analizarlo a fondo, como acostumbro a hacer con los nuevos lanzamientos de calidad.

El nuevo disco de la rapera más particular de todos los tiempos, tras el enorme éxito de crítica y público que cosechó hace dos años con su Arular, se llama Kala y ha sido distribido por XL Recordings.

Siguiendo la línea de su anterior trabajo, la polifacética artista, que también diseña las portadas de sus discos y dirige clips de otros artistas, sigue criticando a la cerrada sociedad británica y a la hipocresía del gobierno hindú frente a los desarraigados, haciendo hincapié, especialmente, en su postura ante la situación de Sri Lanka, aunque en esta ocasión parece haber dejado de lado su vena reggateonera para centrarse más en las programaciones, no en vano ha vuelto a contar con la inestimable colaboración del siempre genial Diplo.

El hip hop sigue siendo la piedra angular de su música, hip hop aderezado con deliciosos toques bhangras y ritmos africanos y con el justo toque electrónico que hacen que nos encontremos ante una obra magnífica.

La verdad es que el disco ya ha sorprendido a más de uno, solo escuchando algunos de sus primeros y sublimes singles, como el festivo y percusivo Boyz, o el megahit discotequero Jimmy, autentica delicia disco funk con toques bhangra, que es toda una declaración de intenciones, ya en su video clip, el cual es todo un homenaje al cine bollywoodense.

En esta ocasión ha optado por pedir la colaboración de artistas de todo el mundo, llevando el etnicismo, en este disco, hasta límites insospechados. Así, prestan su colaboración el rapero africano African Boy, en ese festival de tambores y trompetas que es Husse; los músicos aborígenes australianos The Wilcannia Mob, que ponen sus instrumentos, con didgeridoo incluido, al servicio de Mango Pickle Down River; y la más ilustre de todas las colaboraciones, la de Timbaland en Come Around, elegante tema de tintes R&B.

El resto del disco nos depara una sorpresa detrás de otra, como las bofetadas electro que imprimen temas como el oscuro 20 Dollar, segunda parte del 10 Dollar, track que formaba parte del Arular, y que encierra aires post industriales, el experimental XR2, autentico trallazo technoide o en Bamboo Banger, donde las programaciones se acompañan de percusiones y poderosos graves.

Dentro de este trabajo también encontramos delicias como el alegato ecológico-epidémico de Bird Flu, con colaboraciones aviares incluidas entre los numerosos timbales, el electro hip hop étnico de Down River o la evocadora The Turn.

Sin dudas, la artista ha logrado la difícil tarea de superar su primer y aclamado álbum, y lo ha hecho con creces, facturando una obra magnífica y que no dejará indiferente a nadie.

BLACK STROBE: NUEVAS CARAS, NUEVO CONCEPTO

BLACK STROBE: NUEVAS CARAS, NUEVO CONCEPTO

El proyecto francés, antaño formado por Ivan Smagghe y Arnaud Rebotini, y más conocido como Black Strobe, ya tiene publicado su nuevo trabajo, esta vez en forma de largo, bajo un titulo tan radical como Burn Your Own Church.

El disco ha sido publicado en el sello Playlouder Recordings y supone una ruptura del estilo habitual de los Strobe, conformando una orgia guitarrera en toda regla, cuyo resultado no parece haber convencido a Smagghe, que ha abandonado la formación, para dejar paso al guitarrista David Siskid Shaw, el bajista y teclista Bastien Burger y el batería Benjamin Beaulieu, convirtiendo a Black Strobe, en lo que siempre había querido Rebotini, es decir, en una banda de directo rock, quedando muy lejos aquellos adalides del electroclash que facturaron el genial Me And Madonna.

El disco empieza, engañándonos a través de lo que perece ser un corte techno llamado Brenn Di Ega Kjerke, pero que enseguida da paso a unas afiladísimas guitarras preparándonos para lo que viene a continuación.

Y de esta forma, sigue con Sinning Bright Star, que tras una ácida introducción, nos sumerge en un track de rock electrónico que recuerda a Rammstein o incluso al metal de Fear Factory, en este tema ya se aprecia el protagonismo de la grave voz de Rebotini, que sigue teniendo un papel importante en la mayor parte de los temas que componen el álbum. Esta pasión por el death metal también se ve en otros temas como You Should Be o Not What You Need.

Se aprecia en muchos momentos, la otra pasión musical de Rebotini, la que siente por el rock gótico, en tracks como Blood Eye Shoot  o, sobre todo, en el siniestro Crave For Speed y, también, aunque bajando la furia, y con ello, la calidad, en las baladas neogóticas Lady 13 y Girl Next Door.

Tampoco se olvida del rock más clásico en temas como I’m A Man, primer single del disco, con remezcla de Audion incluida, y en Last Club On Heart, tema que también bebe, en parte del sonido oscuro de Joy Division.

El único tema que parece seguir la línea Black Strobe es Buzz Buzz Buzz Buzz, un tema de corte techno con guiños a la EBM de Front 242 o Nitzer Ebb.

En definitiva, nos encontramos ante un trabajo que sorprende pero no convence, veremos que más nos depara esta nueva faceta de los Strobe y, en todo caso, seguiremos la carrera en solitario del que, en mi opinión, era el alma del grupo, el señor Smagghe.

 

STEAK: EL EXTRAÑO MUNDO DE MR. OIZO

STEAK: EL EXTRAÑO MUNDO DE MR. OIZO

Quentin Dupleux, saltó a la fama hace unos años gracias a un pequeño muñeco amarillo, llamado Flat Eric, protagonista de un anuncio de Levis, y que bailaba al pegadizo sonido de ese bombazo electro discotequero llamado Flat Beat, que el propio Dupleux, produjo bajo el nombre de Mr. Oizo, proyecto apadrinado por el más grande DJ de todos los tiempos, el gran Laurent Garnier, a través de su discográfica F Communications.

Pues bien, muy pocos conocen las inquietudes audiovisuales de este productor galo, el cual se inició en el mundo de la música como realizador de video clips. En el caso que nos ocupa ha aunado sus dos pasiones, y su debut cinematográfico, un film llamado Steak, que se estrenó el pasado 20 de Junio en el país vecino, viene acompañado de una curiosa banda sonora, para la que ha decidido contar con la inestimable ayuda de dos grandes de la electrónica francesa: Sebatian Tellier y Sebastian.

Lo que encontramos en este trabajo, facturado por la discográfica Because Music France, son una serie de tracks, de corta duración, llenos de glamour electrónico, donde el electro bizarro se combina a la perfección con la elegancia funk y pop, y con numerosos guiños al ingenuo cine de principios de los ochenta.

Ya el primer tema, un score llamado Arrival, resalta por su carácter pseudo épico para romper en el segundo tema, bautizado como Stakestead, que recuerda enormemente a los momentos más cómicos del cine de Luis de Funes, con los consabidos elementos electrónicos que tanto gustan a Monsieur Dupleux.

Tras este divertido tema, nos encontramos con una autentica delicia electro funkoide, llamada Chivers As A Female, con toque acido incluido, para seguir con lo que parece ser un fragmento extraído de la película.

El siguiente tema, Letrablaise, es un ochentero ritmo que, a golpe de viejo sintetizador, nos retrotrae a los sonidos de gente como Emerson, Lake & Palmer. Tras este, encontramos uno de los temas que más me gustan del álbum, Ringardos, una bizarrada con toques de funk sucio y electro añejo, que parece hecho con un casio de juguete.

Después viene el melancólico momento de Stadium, protagonizado por los tañidos de una guitarra, para posteriormente volver a los ochentas mas morodernianos, a través de los sintetizadores, a lo OMD, de Itea.

Vuelve al electro funk setentero con Plug It y nos hiela la sangre con X Smidcht, una especie de score, que parece sacado de una película de ciencia ficción de serie b.

Tras esto llega el pop electrónico del sorprendente Hashis Vers, donde las bases electrónicas van acompañadas de un banjo, para seguir con el electro experimental de Blue Wet Shirt.

Los sintetizadores ochenteros siguen dominando en Victimo y también en Top 50, donde, además, se introduce en terrenos funkoides, a través de un saxofón distorsionado.

El casio de juguete vuelve a oírse en Exploiters y tras este, llega el tema más techno del álbum, el bestial C.H.I.V.E.R.S, que continua con el bailable ritmo de Bonhomme, que guarda unas dosis de suspense, y que enlaza con el melancólico, pero bizarro, Toizelle.

Tras esto la recta final del álbum, que comienza con el pop psicodélico, de aires setenteros, de Kinder, que nos recuerda enormemente al sonido de Air, para continuar con el suspense electrónico de Bleue y cerrar con Construction, un tema de sonidos tradicionales, acompañado de percusiones y silbidos, y que nos hace pensar en cabalgatas y desfiles militares.

Tras escuchar la curiosa banda sonora solo nos queda visionar la película, aunque, después de escuchar su score y conociendo al señor Dupleux, nos podemos esperar muchas sorpresas.

 

EL POP GAMBERRIL DE HELLOGOODBYE

EL POP GAMBERRIL DE HELLOGOODBYE

Un curioso proyecto californiano revolucionó el mundo de la música al sacar su álbum de debut tan solo en formato digital. Tras un enorme éxito en su país natal, el pasado 12 de Junio, el primer trabajo de Hellogoodbye, que es como se llama la formación, llegó a nuestro país.

Este curioso grupo está formado por cuatro inquietos jóvenes, obsesionados por el sonido de los Beatles, como se puede desprender del nombre del grupo, el cual ha sido trasladado a la era actual, a través de once temas, que son los que componen Zombies! Aliens! Vampires! Dinosaurs!, que es el extraño titulo con el que han decidido bautizar este álbum.

Sin embargo, en este trabajo hay también tributos a los primeros U2, al sonido ochentero de gente como Duran Duran o The Human League o, incluso al pop gamberro de Green Day.

El primer single, Here (In My Arms), ha sido todo un bombazo y es tan solo una pequeña muestra de lo que esconde este disco, mayormente destinado a su escucha por los universitarios de turno, con ganas de fiesta.

Y eso es lo que es el álbum en sí, una serie de canciones destinadas a hacer saltar al público juvenil, sin más pretensiones.

En palabras de Kline, uno de los miembros del grupo, "Nunca pensé en un álbum como un álbum. Sólo pensé en canción por canción. Para cada una tenía una idea diferente de sonido. Cada tema es una producción distinta y ese era el objetivo. Cada canción fue tratada como algo único, con su propio sonido".

La verdad es que, sin ser un gran álbum, han aportado un poco de frescura al panorama musical y eso es algo que siempre se agradece.

 

OLIVER KOLETZKI: SOBREDOSIS MUSICAL

OLIVER KOLETZKI: SOBREDOSIS MUSICAL

A Oliver Koletzki le pasa lo que a John Dahlback, es decir, que, aunque sin llegar a ser tan prolífico como el menor de los primos suecos, su exceso de producciones, hacen que su carrera discográfica sea un tanto irregular, alternando trabajos de calidad con otros más mediocres.

Tras facturar gran cantidad de producciones en los últimos años, contando el famosísimo Muckenschwarm, pinchado hasta la saciedad en las mejores cabinas del mundo, ahora, al dj y productor alemán, le ha dado por estrenarse en el mundo del largo, y lo ha hecho a través del álbum Get Wasted, facturado, como no podía ser de otro modo, en su propio sello, Stil VonTalent.

El propio Koletzki describe el estilo que predomina en este disco como dreamy minimal y stomping dancefloor, extraños términos en los que se engloba ese nuevo house electrónico que esta tan en boga y que roza de manera flagrante estilos como el electro, el mínimal o incluso el trance, algo que ha caracterizado la mayor parte de las producciones de este artista.

Para elaborar este álbum, Koletzki ha contado con la inestimable ayuda de colegas como Florian Meindl, Martin Eyerer o Kiki, que colaboran en alguno de los temas que componen este álbum.

El disco está compuesto por once tracks, entrelazados entre sí, confeccionando el álbum como si fuera una sesión y abarcan desde los sonidos más comerciales hasta el house mas electrónico.

Encontramos muestras de deep house, con tintes étnicos, al más puro estilo Blaze o Basement Jaxx, en When We Were Young o acercándose al high energy y a los sonidos morodernianos en Requiem Fur Die Vernunft.

Sus flirteos con el trance son numerosos, aunque donde mejor se pueden comprobar son en temas como Don`t Forget To Get Home o Kick Trick, aunque le lanza unos guiños a la cyberdelia en Song For S.

Hay que comentar las dos partes del tema que da título al álbum, mientras que el primer Get Wasted se mueve por terrenos detroitnianos, su continuación penetra en los sonidos más cercanos al mínimal.

El house más tech y funkoide lo encontramos en tracks como Diesel Lied Glaubt An Sich o Bud Spencer, mientras que la contrapartida a este último, titulada, por supuesto, Terence Hill, en ese curioso homenaje a la famosa pareja de actores cómicos italianos, es una pieza de electro funk llena de matices.

Cierra el disco con el más experimental de todos los temas, el warpiano Meniscus , una suerte de techno experimental que recuerda, aunque parezca sorprendente, a gente como Autechre o Pan Sonic, en su lado más bailable.

Haciendo honor al título del álbum, Koletzki nos indica que está repleto de ideas musicales y que esto es solo una muestra de lo mucho que nos tiene que ofrecer.

 

EXHAUSTIVO ANALISIS DE PLANET EARTH

EXHAUSTIVO ANALISIS DE PLANET EARTH

Ya está a la venta en nuestro país el nuevo álbum del Príncipe de Minneapolis, del que ya comenté algo en este blog, no hace mucho, debido a la polvareda que levanto por su polémica decisión de regalarlo con la compra de un ejemplar de un diario británico.

Pues bien, desde ayer, lo nuevo de Prince, ya ocupa los estantes de las tiendas de discos españolas, aunque fue presentado en un directo que realizó en un festival de Jazz, en Suiza.

Nos encontramos ante el que se puede calificar como el trabajo más fresco de este artista, con colaboraciones de la talla de Morris Hayes, Shelby J o el gran Maceo Parker. Por supuesto, no podían faltar sus amigas Wendy y Lisa, sus compañeras en la formación The Revolution, con la que trabajó Prince a finales de los 80.

El disco está compuesto por diez temas, los cuales voy a comentar a continuación:

El pistoletazo de salida lo lanza el tema que da título al álbum, Planet Earth, una impresionante balada rock que recuerda al mejor Bowie, con unos riffs de guitarra impresionantes.

Tras este alegato ecologista, sigue el que ha sido el single de adelanto de este trabajo, el pegadizo Guitar, un tema de funk rock movido pero muy sensual al más puro estilo Prince.

El disco sigue con otra enorme balada, titulado Somewhere Here On Earth, Prince saca a relucir su enorme falsete vocal en un evocador tema soul con tintes jazzísticos.

El cuarto tema del tracklist es The One U Wanna C, en el que Prince homenajea el pop de los 60, con referencias a The Monkees o The Kinks.

El siguiente tema, Future Baby Mama, es una autentica bizarrada, consistente en una canción distorsionada de tintes futuristas.

El trabajo sigue con Mr. Goodnight, tema en el que el artista se confiesa y nos habla de si mismo a través del hip hop.

El de Minneapolis se vuelve a poner melancólico en el siguiente tema, All The Midnigts In The World, a través de una balada pop que nos vuelve a retrotraer a los 60.

Tras este, viene Chelsea Rodgers, el tema más bailable del álbum, donde se acompaña de coros femeninos para facturar una delicia de funk infeccioso, que bebe directamente del sonido Motown de gente como The Supremes o The Temptations.

Ya en la recta final, nos encontramos con Lion Of Judah, un tema de rock melódico, donde las guitarras toman una gran relevancia, y que nos vuelve a recordar a The Kinks o, incluso, a los Rolling Stones.

Y cierra el álbum el tema Revelation, otro tema de buen pop con aires funk, que clausura el disco de forma magistral.

 

 

 

PRINCE: ESTAMOS QUE LO REGALAMOS

PRINCE: ESTAMOS QUE LO REGALAMOS

Prince ha vuelto con fuerza y, de nuevo, su regreso viene cargado de polémica, ya que ha decidió regalar su nuevo disco, llamado Planet Earth, con la compra, de un ejemplar, del pasado domingo, del periódico británico The Mail On Sunday, lo que le ha generado más de un encontronazo con las discográficas.

Este nuevo disco, producido por la discográfica Columbia Records, no verá la luz en las tiendas hasta el 24 de Julio, y, según el propio artista, esta campaña tiene su razón de ser en su postura contraria a los negocios especulativos de la industria discográfica.

El single de adelanto se llama Guitar, una muestra de funk y rock, con esos toques sucios y sensuales, a los que ya nos tiene acostumbrados el de Minneapolis. Podéis escuchar este tema en el siguiente enlace: http://www.youtube.com/watch?v=Jeqr5yH8qw0.

Estad atentos, ya que próximamente hablaré, con más detalle, de este esperadísimo trabajo.

ARIL BRIKHA: EL HOMBRE Y LA MAQUINA

ARIL BRIKHA: EL HOMBRE Y LA MAQUINA

La verdad es que este está resultando un año muy fructífero para el nórdico Aril Brikha, tras publicar dos EPs espectaculares, en dos de los mejores sellos de música dance y electrónica del momento, Winter, en Kompakt y Akira, en Poker Flat, el dj y productor no ha dejado de trabajar y tiene preparado, para ser publicado, un nuevo álbum con temas totalmente nuevos, en uno de los sellos más emblemáticos de todos los tiempos, en lo que a música electrónica se refiere, en el famoso label Peacefrog.

El álbum, compuesto por doce impresionantes tracks, se titula Ex Machina y es curioso que haya sido bautizado así, ya que el sonido de las maquinas predomina a lo largo y ancho del trabajo, pero se tratan de maquinas humanizadas, a las que el sueco ha querido dotar de sentimientos. Lo que Brikha ha querido exponer en todos y cada uno de los temas que componen la obra es su amor por el sonido de Detroit, algo que ha caracterizado a su música desde siempre, no en vano su primer álbum, se publicó hace unos años en el sello Transmat, del maestro Derrick May, y en el incluyó su mayor éxito hasta la fecha, el archiconocido Groove La Chord.

Lo que nos encontramos al escuchar el disco de principio a fin, es un evocador sonido, que parece facturado directamente desde la Ciudad del Motor. Melodías orgánicas y evocadoras, sintetizadores flotantes y reminiscencias futuristas pueblan los surcos de este disco, como se puede comprobar en tracks como Last One o More Human, que marcan el inicio del LP.

En los siguientes temas, Lady 707 y Leaving Me, le da un repaso al electro más elegante y da un giro hacia el techno más funkoide en temas como Gres o Contact.

Sin embargo no ha querido olvidar sus raíces europeas, otorgando ese sonido mas trancero que ha caracterizado a sus últimos trabajos, y eso se nota en los temas más pisteros del disco, como Room 337, Kept Within o Ex Machina, aunque se lleva la palma el espíritu rave y neoindustrial de Kind Of Nitzer.

El disco concluye con una breve pieza ambiental, de poco más de un minuto de duración, llamada Anna's Theme, y que está impregnada de un sonido cercano al lounge mas evocador.

El próximo 30 de Julio es la fecha elegida para el lanzamiento del disco, que, en mi opinión, está lleno de elegancia y que gustará a todos aquellos que, como yo, adoren el elegante sonido de Detroit. La verdad es que hacía tiempo que no se escuchaba a unas maquinas, transmitir tanto sentimiento.

  

SLAM: EL RETORNO DE UNOS CLASICOS

SLAM: EL RETORNO DE UNOS CLASICOS

Uno de los proyectos más influyentes de la electrónica, ha sacado nuevo disco al mercado. Se trata del nuevo trabajo del proyecto formado por Stuart McMillan y Orde Meikle, es decir, Slam.

Este nuevo largo se titula Human Response, ha sido publicado en Soma Records, como no podía ser de otro modo.

La verdad es que en este disco, los autores de aquel himno llamado Positive Education, siguen con su tónica habitual, otorgando cierta experimentación a la pista de baile, aunque les da, en algunos momentos  por volverse hacia terrenos más oscuros  alejados del dancefloor.

En su primer single de adelanto, Azure, facturan su sonido habitual, lleno de loops y bases rítmicas hipnóticas, con su ya conocido aire detroitniano, que es la mayor influencia a lo largo de todas las obras del dúo. Esta influencia del techno primigenio de la Ciudad del Motor toma aun más relevancia en tracks como Looking North, Ghost Song o en Memoir, este último en su faceta más introspectiva. También deciden acudir al Detroit mas influenciado por el synth pop, en el romántico No One Left To Follow.

Los momentos paisajísticos abundan a lo largo de la obra, a través de piezas ambientales como Subject Invisible o Weekday Morning, en los sonidos post industriales de Reluctant Traveller. Aunque la palma se la lleva el tema We Medicate, en el que, con acompañamiento de la inigualable voz de Dot Allison, facturan un autentico track de trip hop oscuro y melancólico, que bien podría haber pertenecido a unos inspirados Portishead.

Por último, este disco incluye un par de piezas destinadas, directamente, a la pista de baile: se trata de Stacatto Rave y de Were Not Here, dos temas de techno house pistero e hipnótico.

Una nueva obra facturada por uno de los más importantes iconos de la música electrónica y de baile de todos los tiempos.

JUSTICIA DIVINA

JUSTICIA DIVINA

Uno de los proyectos más sorprendentes de los últimos años, dentro de la cultura dance, son los franceses Gaspar Augé y Xavier de Rosnay, más conocidos como Justice, que acaban de publicar su primer álbum, a través del sello Ed Banger, y con un titulo de lo más original: +, es decir, para nombrarlo solo han usado la iconografía de la cruz cristiana.

Desde que triunfaran con la revisión del tema del Never Be Alone de Simian, que se convirtió en un autentico hit en las pistas de baile, y que ha vuelto a saltar a la palestra, gracias a su galardonado video (del que ya he hablado en este blog) y a sus recientes remixes, este dúo ha sido reconocido gracias a sus remezclas para gente como Franz Ferdinand, Daft Punk, Soulwax, Fatboy Slim, o incluso, para Britney Spears.

Sin embargo, su afán productivo ha sido más bien escaso, ya que, aparte de la revisitación del tema de Simian, solo han publicado dos EPs: el famoso Waters Of Nazareth, un track de electro contundente, y el pegadizo D.A.N.C.E, como single de adelanto de este trabajo, y que promete ser uno de los temas más radiados, y bailados, durante este verano.

Ahora, han decidido coger el toro por los cuernos y sacar este largo, en el que facturan un sonido muy particular lleno de riffs de guitarra distorsionados, efectos brutales, breaks poderosos y sonidos épicos, como iremos viendo.

Casi todos los temas del disco parecen enlazados como si se tratase de uno solo, siguiendo una secuencia lógica, intentando contar algo a lo largo de la obra.

Lo primero que nos viene a la cabeza es que los franceses nos han querido transmitir su particular visión de la biblia, y lo hacen a través de un inicio que es toda una declaración de intenciones: tras un megalómano Genesis, que nos recuerda al post funk y al sonido Emerson, Like & Palmer, sigue, casi sin respiro, con Let There Be The Light (algo así como Y Se Hizo La Luz), siguiendo la misma línea que el anterior.

Tras este bíblico comienzo llega D.A.N.C.E., un autentico homenaje al sonido disco y al funk de la Motown, evocando, especialmente, a los Jackson Five. A este le siguen New Jack, una especie de paranoia de funk experimental, con tintes Kraftwerkianos y las dos partes de Phantom, tema que ocupa la cara B del D.A.N.C.E EP, y que conforman una suerte de psicofonías robóticas sobre un bajo post funk, al más puro estilo George Clinton y al que se unen unos riffs guitarreros y sintetizadores antiguos, extraídos del sonido Philadelphia.

El sonido funk rock, a lo Franz Ferdinand, se respira en el siguiente tema, Valentine, adornado, de nuevo, con sintetizadores setenteros, y enlazando con el hip hop, al estilo Salt N Pepa, de The Party. Sin darnos un momento de respiro, el disco retoma el sonido de Franz Ferdinand, aunque mirando hacia la new wave de Talking Heads, en DVNO y vuelve con Emerson, Like & Palmer, con el funk acelerado de Stress.

Tras esto, el colofón llega con el hit Waters Of Nazareth, y un épico final, en una alusión al más puro metal, con los impresionantes riffs de One Minute To Midnight.

La verdad es que debemos afirmar que el debut en largo de estos franceses no está nada mal. Que tiemblen Bangalter y compañía, que el French Touch vuelve, y con fuerzas renovadas.

LAS MULTIPLES CARAS DE WAGON COOKIN

LAS MULTIPLES CARAS DE WAGON COOKIN

Los hermanos Gayarde, más conocidos como Wagon Cookin, han regresado con nuevo álbum bajo el brazo, y lo han hecho por todo lo alto, a través de un doble disco, publicado en el sello Pias.

El titulo con el que se ha decidido bautizar el álbum lo dice todo: 2 Faces, y ya nos viene a indicar que las facetas que esconde este disco son muy variadas, ya que los navarros han decidido incluir, por primera vez, todos los sonidos que han influenciado en su música desde su debut en largo, con aquel lejano Appetizers.

Así encontramos dos partes diferenciadas, la primera, que sigue la línea que venían siguiendo en todos sus trabajos, es decir, se trata de un disco de fusión, en el que el funk, el soul o el deep house se mezclan con el jazz, la bossa nova y los ritmos latinos, todo ello aderezado con cálidas voces, dando lugar a ese sonido que tanto les ha caracterizado.

Es en este primer disco donde siguen la línea continuista, con temas como el evocador Incredible, una muestra de jazz con tintes latinos, a lo Tito Puente o en el funk, al más puro estilo Motown, en temas como Ridin' In The Wind, If You Love Me, Shake You o What's It Like, que nos recuerdan a gente como The Temptations o The Supremes, e incluso, en algunos momentos, se acerca al sonido post disco de la era Salsoul.

No se olvidan de su amado Brasil, como bien demuestran en la deliciosa bossa nova de Desejo, tema en el que los ritmos cariocas más sensuales se mezclan con el jazz y con el deep house, de manera espectacular.

Pero el tema que más sorprende de este primer volumen es Mr Sun, una extraña pieza de cálido soul, revisitado a través del frió sonido de Kraftwerk, facturando una pieza realmente curiosa.

Pero donde realmente rompen con su estética habitual es en el segundo volumen, donde toman relevancia sus influencias mas electrónicas: el techno, el house o incluso el acid irrumpen sorpresivamente, dando lugar a las piezas más bailables de toda la discografía de este proyecto fraternal.

Esta tendencia hacia el dancefloor va a avanzando progresivamente a lo largo del disco, aunque sorprende ya en el inicio del volumen, con el divertido Jumps On Me, un tema de deep house, con tintes electrónicos, estela que continua con los poderosos bajos de Funky Stuff, track con el que rozan, peligrosamente, el speed garaje, y con el sonido mas deep, al más puro estilo Blaze, presente en el tema Start To Play.

Y entonces es cuando llega una de las mayores sorpresas del disco: el tema En El Barrio, que lleva el concepto de fusión a su máxima expresión, a través de un track de house electrónico, con cierta tendencia hacia el minimalismo, al estilo de gente como Ame o Gabriel Ananda, pero que a mitad de canción rompe con un corte flamenco, que descoloca, gratamente, al oyente.

Tras esta genial pieza, es cuando comienza la recta final, que es, sin lugar a dudas, la más puramente destinada a la pista de baile.

Aquí es donde incluyen los temas en los que los estilos más electrónicos toman una mayor relevancia. De esta forma, en Don't Stop, facturan un house electrónico con toques tribales, se introducen en el farragoso terreno del acid house con Fever, dan un impresionante giro hacia el techno house mas pistero con Contour Generator y nos seducen con un tech house mas psicodélico, con toques ácidos y funkoides, en un magistral y evocador cierre a través del tema Mallorca.

En definitiva, nos encontramos ante el disco más sorprendente de este dúo español, una propuesta que nos demuestra que en esta, nuestra piel de toro, también se puede hacer música de calidad.